La verdad sobre Jesús se puede encontrar incluso en el Corán

Resumen:

Para los musulmanes, el Corán es el último libro revelado por Dios, y Mahoma es el sello de los profetas. Creen que vino a corregir los errores de las religiones reveladas anteriormente, en particular el judaísmo y el cristianismo. En particular, critican a los cristianos por haber "exagerado" su religión al hacer profeta a ".Jesús hijo de María", "igual a Alá". También acusan a judíos y cristianos de haber falsificado los libros revelados, la Torá de Moisés y el Evangelio de Jesús, así como los Salmos y una "escritura" revelada por Abraham.

Pero esta acusación de falsificación es desmentida por el propio Corán, como veremos, y el lugar excepcional que se concede a Jesús en este mismo libro debería normalmente llevar a los lectores a cuestionarse su verdadera identidad.

El Corán y los libros revelados (Torá y Evangelio)

Los artículos anteriores ya han demostrado que las acusaciones de falsificación de libros son, desde un punto de vista histórico, difíciles de sostener, ya que existen numerosas pruebas que apoyan la historicidad de los Evangelios y del Antiguo Testamento.

Pero tampoco está claro que el propio Corán haga esta acusación. Al contrario, en varias ocasiones, el Corán afirma "confirmar" los libros anteriores: "Os ha enviado el Libro de la Verdad, que confirma los Libros anteriores a él. Y envió la Torá y el Evangelio"(sura 3:3). Esta observación se repite en todo el Corán (sura 2,41; 2,89; 2,91).

Además, reconoce la pertinencia de su juicio: "Enviamos la Torá, en la que hay guía y luz. Sobre su base, los profetas que se sometieron a Alá, así como los rabinos y los doctores, juzgan los asuntos de los judíos. Pues a ellos se les ha confiado la custodia del Libro de Alá y son sus testigos" (sura 5:44). Cabe señalar que este juicio no sólo se refiere a la época de los profetas, en cuyo caso podríamos suponer que la Torá fue falsificada posteriormente, sino también a la de los rabinos. Hay que señalar que este papel de los judíos como "guardianes del Libro" está en consonancia con ciertas afirmaciones de los Padres de la Iglesia. Pero, sobre todo, llama a sus contemporáneos como testigos: "Y si dudáis de lo que os hemos revelado, preguntad a los que leyeron el Libro revelado antes que vosotros" (sura 10:94). ¿Cómo podría ser así si estos libros (la Torá y el Evangelio) fueran falsificados? El Corán sólo afirma que judíos y cristianos malinterpretan sus libros o no los obedecen, pero en ningún momento acusa a los propios libros de estar corrompidos. De hecho, fue la tradición musulmana la que, al ver las discrepancias entre la Biblia y el Corán, se vio obligada a concluir que la Biblia había sido falsificada, para defender la integridad del Corán.

En cuanto a estas discrepancias, desde un punto de vista histórico, y dejando de lado cualquier sesgo confesional, es mucho más relevante deducir que el escritor (o escritores) del Corán a veces malinterpretó o mezcló textos bíblicos -o que les dio una reinterpretación o comentario muy personal.

La descripción coránica de Jesús

¿Puede el Jesús descrito en el Corán ser sólo un hombre? Puede parecer una pregunta extraña, dadas las conocidas críticas musulmanas a los cristianos por divinizar a Jesús. Esta vez, sin embargo, hay que decir que el propio Corán hace esta acusación. Y sin embargo, a pesar de esta negación de la divinidad de Jesús, el propio Corán no puede dejar de reconocer que su estatus es tan excepcional que la cuestión de su identidad real puede ser planteada por todo lector.

En primer lugar, el Corán insiste en que Dios ha dado "pruebas"a Jesús: "Dimos el Libro a Moisés y enviamos profetas después de él. Y a Jesús, hijo de María, le dimos pruebas y lo fortalecimos con el Espíritu Santo"(sura 2,87). Aunque estas "pruebas" no están detalladas, podemos pensar en los numerosos milagros relatados en los Evangelios. La tradición musulmana reconoce estos milagros, y el Corán menciona explícitamente varios de ellos: la curación de un niño ciego y de un leproso, y la resurrección de los muertos. Pero el Corán también añade otro dato interesante, al afirmar que los judíos reconocían los milagros de Jesús, pero los atribuían a la magia (sura 5.110). Estas afirmaciones coinciden con el testimonio de los Evangelios y el Talmud. Son importantes porque atestiguan que ni siquiera los adversarios de Jesús negaron sus milagros.

También hay que señalar que Jesús es descrito como la "palabra de Dios" y el "aliento/espíritu de Dios" (sura 4:171). Estas descripciones son, por supuesto, similares a las del famoso prólogo del Evangelio de Juan.

Por último, el Corán menciona en varias ocasiones el nacimiento milagroso de Jesús y ataca a quienes se atreven a calumniar a María (sura 4,156). María es, de hecho, la única mujer nombrada en el Corán, y un sura -el número 19- lleva incluso su nombre.

Pero este nacimiento plantea interrogantes. ¿Por qué se le concedió tal milagro a un hombre corriente? ¿Por qué no tuvo una concepción ordinaria? Ningún profeta antes de él, y ningún profeta después de él, experimentó esto. Si Jesús era un profeta como los demás, e incluso el primero de todos los profetas, ¿por qué semejante nacimiento? Este milagro único es totalmente coherente con la fe cristiana, que reconoce la divinidad de Jesús. Resulta incomprensible si se niega esa divinidad.

Más allá de las razones para creer:

Además de sus motivos de verdad, el cristianismo y su doctrina sintonizan profundamente con las aspiraciones y necesidades humanas.

Ir más lejos:

Rémi Gomez, La divinité du Christ face à l'islam  (La divinidad de Cristo frente al Islam), Marpent, BLF Éditions, 2021.

Más información:

• Odon Lafontaine, El gran secreto del Islam, 2015 (disponible en línea).
• Vídeo de YouTube " El relato de los historiadores sobre el Corán (Mohammad Ali Amir-Moezzi y Guillaume Dye) ".
• Vídeo de YouTube "Investigación académica sobre el Corán: nuevos enfoques ".